I. Introducción:
En el cementerio de
High Gate (Puerta Grande) de Londres,
Inglaterra, Hay un imponente pilar de granito
que marca la tumba de Carlos Marx. Cincelado en la
piedra se ve el siguiente dicho incisivo del padre del comunismo:
¨ Los filósofos sólo
interpretaron el mundo de diferentes maneras; la cuestión es cambiarlo¨
Esta declaración hace pensar:
La iglesia Adventista
ha estado proclamando por más de un siglo que el mundo necesita cambiar. La cuestión es cómo cambiarlo.
Existen muchas
soluciones contradictorias que el hombre ofrece:
El intelectual dice: “Aprende”, la instrucción es el camino.
El economista dice: “Lucra”, El desarrollo económico es la respuesta.
El anarquista dice: “Quema”, la sociedad está corrompida y llena de
injusticia ; para cambiarla , hay que destruirla ¨. (Anarquía: Dirección por falta de
dirección. Anarquista: Persona
que desea la anarquía).
Con todo, la respuesta
final está en el evangelio eterno que la iglesia proclama a todo el
mundo:
Consiste en convertirse.
Mateo 6:33. ¨ Mas buscad primeramente el reino de Dios y
su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas¨.
II. El Mensaje de la
Iglesia al Mundo:
1.
El mensaje de la iglesia al mundo es que
revolución sin regeneración es futilidad (o sin importancia).
2.
Para que la sociedad pueda cambiar, primero
tiene que cambiar la humanidad desde adentro.
3.
No hay nada que pueda cambiar los
pensamientos del hombre fuera del poder redentor del evangelio de Jesucristo.
4.
Ningún invento humano, por ingenioso que sea,
puede cambiar el corazón del hombre.
5.
A menos que el corazón cambie, la sociedad
seguirá siendo corrupta, injusta y como
dice la Biblia, perversa.
6.
La iglesia establecida por Dios, tiene un
mensaje para el mundo.
7.
Un mensaje que se interesa en primer lugar en
la revolución espiritual, redentora y
moral.
8.
Un mensaje que hace de las personas sean
nuevas criaturas en Cristo Jesús.
9.
Un mensaje que incorpora a las personas a la comunidad de la
iglesia remanente.
El Apóstol Pablo
describe elocuentemente la naturaleza de nuestro mensaje evangélico como la
¨ Potencia de Dios para salud ¨ (Romanos 1:16).
III. El mundo
necesita un cambio doble:
El poder regenerador del Evangelio luego los lleva al nuevo organismo espiritual de la iglesia.
Segundo, al integrarse en la comunidad espiritual de la iglesia, el creyente es preparado progresivamente, mediante:
la santificación,
para una ciudadanía en un nuevo orden
mundial que comenzará con la segunda
venida de Cristo, nuestro Señor.
Cristo mismo aclaró
la naturaleza de su reino al decir: ¨Mi reino no es de este mundo¨.
IV. Función de la
Iglesia en el Mundo:
Sería un error que la
iglesia ignorara o descuidara los
candentes problemas sociales de nuestros días:
1. La justicia social.
3. El hambre.
4. La explosión
demográfica.
5. El analfabetismo.
6. La violencia, etc.
Son problemas que la
iglesia debe afrontar vigorosamente en el espíritu de Cristo y siempre en el
contexto del evangelio.
Como parte integrante del programa mundial de la Iglesia, debe figurar:
a.
Su preocupación por todas las capas sociales.
b.
Y su ardiente deseo de alcanzarlas.
V. El mensaje de las
Sagradas Escrituras combina:
1.
A los profetas:
a.
Ellos llamaron al arrepentimiento.
b.
A la justicia.
2.
Con los Apóstoles:
a.
Llamaron al arrepentimiento.
b.
A la fe.
c.
A la regeneración en Cristo.
La proclamación
persuasiva de la salvación del pecado mediante Jesucristo y el establecimiento
de un nuevo orden mundial deben ir de la mano con un cristianismo práctico.
Es por eso que la
tarea básica de la iglesia es la proclamación de las buenas nuevas de salvación,
mediante:
1.
El testimonio Personal. Unido a la demostración practica de la vida.
2.
Los estudio Bíblicos que damos después que
hemos tenido una preparación cabal.
3.
Esperar con paciencia la venida del Señor.
Eso implica:
“La
palabra paciencia no necesariamente significa sumisión ante la
opresión y la injusticia sin hacer nada, aunque puede haber circunstancias que
reclamen esta actitud. Lo que sí es definido, es que recurrir a la violencia
para obtener nuestro “derechos” es contrario a los principios del
cristianismo”.
4.
Es imposible que un hombre o una mujer
intemperante sea paciente. primero viene la temperancia, luego la paciencia.(Temperancia
o templanza: Virtud que consiste en moderar los apetitos) de allí que otra
tarea de la iglesia es la temperancia.
Ellen G. White Le
escribió a una persona particular por su intemperancia y le dice:
“Ud. vivió tanto
tiempo halagando al yo y actuando según sus propias inclinaciones que ahora no
puede percibir las cosas sagradas. Sus pasiones
y apetitos lujuriosos lo dominaron. Las bajas pasiones sometieron los
nobles impulsos de su mente y así las propensiones animales se
fortalecieron. Cuando el apetito es el
que controla la razón, se deteriora la noción
de las cosas sagradas. La mente se degrada, los afectos se vuelven
impuros y las palabras y la conducta revelan lo que hay en el corazón”. (2T
95).
5.
La oración: La oración en diversas
circunstancias.
Owen A. troy comenta al respecto: “Es una tendencia humana
que en tiempo de problemas y calamidades llegamos a ser impacientes,
manifestemos incomodidad y nuestra fe se reduce. Nuestros ojos tienden a mirar hacia el piso y
hacia nuestro interior más bien que hacia lo alto. Además, las dificultades
pueden hacer pensar que por alguna razón
nos hemos alejado de Dios y que no hemos recurrido a la oración como
debimos”.
De todos modos, en
tiempo de crisis Satanás:
Tiene mas éxito en
minar la fe de los que no son constantes en la oración.
Por esa razón Jesús
dijo que debemos “orar siempre, y no desmayar” Lucas 18:1.
Reflexione:
¿Cree que Dios oye y
responde las oraciones?
¿Se aferra a las
promesas divinas, aún cuando parezca que sus oraciones no son contestadas?
¿Se dirige a Dios
sintiéndose desamparado y necesitado?
¿Habla con Dios sin
dudas ni temores?
¿Tiene un espíritu de
amor y perdón?
¿Persevera en la
Oración?
¿Aprovecha toda oportunidad
para ir donde suele orar?
¿Ora en público y en
privado?
¿Lleva a Dios sus
deseos, sus alegrías, sus riquezas, sus cuidados y sus temores?
6.
Algo más que debemos tener presente es que:
La proclamación dinámica (con fuerza, con energía) de la
totalidad del mensaje cristiano no es
incompatible con la acción social de la iglesia.
La iglesia
apostólica combinó estos dos elementos de la misión de la
iglesia en la declaración.
“La religión pura y
sin mácula delante de Dios y Padre es está:
Visitar los huérfanos y las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha
de este mundo”. (Santiago 1: 27)
La predicación del
evangelio salvador entraña obligación social.
Sin embargo, el
Evangelio es infinitamente más que un mensaje
social.
El corazón del
evangelio eterno predicado por la Iglesia, es la preparación de un
pueblo:
a.
Proveniente de cada nación de la tierra. Para
que obtenga su ciudadanía en el venidero
reino de Dios.
Si bien la iglesia
trata de mejorar la situación social,
también tiene conciencia cabal que
cualquier tentativa humana de establecer un proyecto utópico en pro de la
acción en la tierra es fantasía.
La tarea suprema de la
iglesia es preparar un pueblo para una ¨ Ciudadanía con fundamento, el artífice y hacedor de la
cual es Dios ¨.
VI. Conclusión:
1.
Salvación del pecado ahora.
2.
El establecimiento de un orden mundial:
feliz, libre, justo, puro y prospero en el futuro.
Mis hermanos Las
buenas nuevas, consisten en que tanto el presente como el porvenir están
cabalmente garantizados en Jesucristo.
Con una seguridad
tal, la iglesia debe avanzar en cumplimiento de su divino mandato redentor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario